miércoles, 24 de agosto de 2011

Quitar la tensión.

A veces llegamos a pensar que estamos en lo correcto, cuando no conocemos sobre ciertas cosas, porque no aceptamos que ignoramos demasiado sobre demsiado. Esto puede radicar en que el ego que muchas veces podríamos cargar, nos orilla a cerrarnos hacia la gran oportunidad que tenemos, para poder conocer una gran cantidad de saberes que llegan de las cosas que no somos para nada sapientes, posibilidades que tendríamos si fuéramos más humildes y resolviéramos nuestra complejidad en pos de la sensatez.

Si analizamos la situación actual, nos podemos dar cuenta de que sólo aprendiendo distintas actividades para nuestra vida, se puede posibilitar la forma en como se puede progresar en nuestro tiempo. Desde esta perspectiva, de una forma u otra, la globalización tiene muchas características más que benéficas para nuestra vida,  aunque lo cierto, ha rebasado nuestras expectativas, acortando las distancias y por ello, haciendo a las personas un tanto histéricas, ya que estas continuamente se tratan de acoplar a la forma que se designa en las urbes más actualizadas. 

¿Qué es lo que creo, se necesita para tomar las cosas desde su punto exacto? La respuesta es muy sincera; lo mejor que podemos hacer es detenernos a pensar y, de cierta manera, contemplar un poco más nuestra vida. Me refiero a que todos sin excepción, tenemos la capacidad de poder crear todo aquello que queramos, para poder satisafacer inquietudes y/o necesidades, y si se puede,  en un futuro que se espera sea cercano, habituarnos a poder encontrar la manera de incorporar estas tantas habilidades que puede que tengamos, a nuestras actividades, para que lo pongamos a trabajar y, si es la suerte que nos llega a tocar, hacerlo como una especie de entrada monetaria que logre, si no aliviar todas nuestras deudas, mínimo algunas de ellas.

No estoy loco, simplemente es una forma de expresar algo que pienso y creo y, por lo menos, se puede tomar como un punto de vista un tanto acertado. Ya las situaciones se dejan ver demasiado apresuradas, pero no por eso debemos de tomar las cosas tal y como nos indican que las hagamos, sin afán de que parezca venida desde una posición insurrecta.  Simplemente es tratar de dar el ánimo a que cada persona, se pueda dar el tiempo necesario para realizar o trabajar en lo que debe y/o quiere, porque de esta manera, a la larga, todas las personas que así lo piensen,  ganarán algo más redituable para sí mismos.  

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